La memoria eidética, o fotográfica, es la capacidad de recordar cosas oídas y vistas con un nivel de detalle casi perfecto. Se trata de un tipo de memoria de caracter casi sensorial, cuyo tiempo de permanencia ronda los 20 milisegundos. Precede a la memoria a corto plazo.
En filosofía, eidética refiere al conocimiento intuitivo de la esencia (del griego eidés). La diferente posibilidad de conocimiento de el fenómeno (apariencia) y el noúmeno (la cosa en sí) es una discusión que viene desde Kant, al menos. Para la solución de la corriente de la fenomenología, a partir de Edmund Husserl, el concepto de eidética es central.
En psicología, las personas con hipertrofia de la memoria eidética pueden recordar cualquier cosa que hayan visto u oído, incluso aunque lo hayan percibido una sola vez y de forma fugaz, en general los recuerdos son menos claros y detallados que las percepciones, pero a veces una imagen memorizada es completa en cada detalle. Este fenómeno se da con frecuencia en los niños, quienes a veces son capaces de reconstruir una imagen tan completa que pueden llegar a deletrear una página entera escrita en un idioma desconocido que apenas han visto durante unos momentos. Los que tienen memoria eidética son capaces de rebobinar los datos de sus percepciones visuales mediante su memoria eidética y proyectarlos sobre la pantalla de un lienzo.
En filosofía, eidética refiere al conocimiento intuitivo de la esencia (del griego eidés). La diferente posibilidad de conocimiento de el fenómeno (apariencia) y el noúmeno (la cosa en sí) es una discusión que viene desde Kant, al menos. Para la solución de la corriente de la fenomenología, a partir de Edmund Husserl, el concepto de eidética es central.
En psicología, las personas con hipertrofia de la memoria eidética pueden recordar cualquier cosa que hayan visto u oído, incluso aunque lo hayan percibido una sola vez y de forma fugaz, en general los recuerdos son menos claros y detallados que las percepciones, pero a veces una imagen memorizada es completa en cada detalle. Este fenómeno se da con frecuencia en los niños, quienes a veces son capaces de reconstruir una imagen tan completa que pueden llegar a deletrear una página entera escrita en un idioma desconocido que apenas han visto durante unos momentos. Los que tienen memoria eidética son capaces de rebobinar los datos de sus percepciones visuales mediante su memoria eidética y proyectarlos sobre la pantalla de un lienzo.
Eso lo dice el wikipedia, ahora digo yo: Lo contrario a la memoria eidética es la memoria de teflón, a la cual no se le pega nada.
5 comentarios:
más bien será que quien posee memoria eidética no reflexiona o tiene problemas para comprender... ¿no? como Funes y Borges, esos memoriosos.
ja.
(no bob autista, tú no... o ¿si?)
O como Henestrosa jaja
no_alucines@msn.com dice (10:58 p.m.):
pero, por ejemplo, huelo un perfume de kalvin klein
no_alucines@msn.com dice (10:58 p.m.):
y recuerdo a mi amigo hailé
no_alucines@msn.com dice (10:59 p.m.):
y la última vez que lo vi
no_alucines@msn.com dice (10:59 p.m.):
en mi casa sentado con su chamarra negra de cuero
no_alucines@msn.com dice (10:59 p.m.):
muchas cosas las relaciono por situaciones cotidianas
no_alucines@msn.com dice (10:59 p.m.):
a ti te he recordado por tu cabello colocho
no_alucines@msn.com dice (11:00 p.m.):
a víctor lo recuerdo por lo de "la amiga de raúl"
ghelly_19 dice (11:00 p.m.):
Bueno, sólo recuerdo un olor en especial
el olor de la cocina de mi madrina en Villaflores
pasé muchos buenos ratos de mi niñez ahí y tenía un olor muy peculiar
no sé, como a una mezcla de cereales con dulce y vainilla
siempre recuerdo ese olor
y al recordar el olor me acuerdo perfectamente de la casa, quién sabe porqué
una vez, no me acuerdo dónde sentí otra vez ese olor
y lo reconocí inmediatamente
pero nunca supe porqué olía así ahí
Publicar un comentario