Así estaban las cosas José. Vos no lo viste porque tu brazo se quedó dormido junto a todo tu cuerpo. Los laureles se mecían al principio; y a luego corrían y gritaban. Se desgajó la tierra y todos nos desmoronamos. ¡Cuántos ojos infectados de angustia!, ¡Cuántas bocas abiertas de asombro! Sucedió muy rápido. Nosotros nos brincamos pal otro lado, pero ya era inevitable que vos, con todo y que ya despertabas, te quedaras al otro lado de la zanja. Y pos, ni modo de sacrificarse uno también. Si no hubieras comido tanto, no te hubieses privado de sueño y habrías sentido todo lo que estaba pasando. Con tanto borlote, quién no iba a abrir los tamaños ojotes para ver cómo corrían todos de allá para acá. Pero soñaste bonito, ¿no?, ¡Ahhh, cómo no!, si yo oía cómo es que llamabas a la Lucía en tus sueños. Si hasta dormido has de ser menso vos. Ya ves, ahora por quedarte jetón, estás condenado a vivir tú sólo en esa parte de la tierra que quedó desolada, contaminada pues. Y eso que aún no se sabe qué tan mala sea esa cosa que cayó. En fin, tú que te quedaste por esos lares, seguramente descubrirás pronto de qué se trata; mientras tanto no te preocupés, yo te voy a traer diario tu comidita, aquí te la voy a aventar pal otro lado. No te preocupés, buscá un lugar donde pasar la noche, con suerte algunos edificios quedaron casi enteritos. Ya lo ves, y vos que querías tu casita de infonavit. Bueno, yo ya me voy Joselito; tú tranquilo, calma, calma que el terremoto ya pasó. Y como dice el dicho...
LA PROFUNDA SOLEDAD DEL QUE LLAMAN POETA
Hace 20 horas
4 comentarios:
Jeje,me gusto el pequeño cuento...
Asi es el sueño...
Yo soy un Joselito. Me quedó con esta oración:
"Se desgajó la tierra y todos nos desmoronamos."
Has leído ...y no se lo tragó la tierra de Tomás Rivera?
CAMBIO DRAMÁTICO ENTRE ESTE Y EL TEXTO DE FECHA POSTERIOR
Hola Antenita:
No, no he leído el texto que me mencionas, pero si lo recomiendas lo buscaré. Gracias por pasar por aquí y leerme.
Saludos!
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